Nombrada en honor a Yuri Gagarin, el primer ser humano en orbitar la tierra y popularmente conocida como “Salto Cero”, es la estación más grande que ha construido la humanidad en el espacio profundo, aún tras al descubrimiento del relé de Caronte. La estación llegó a ser conocida como “Salto Cero” porque estaba pensada para ser el punto de salto para la expansión humana debido a las fallidas investigaciones que allí se realizaban sobre el viaje más rápido que la luz, previos al desarrollo de la tecnología de campo de efecto de masa.
Es un diseño en forma de "Esfera de Bernal" con zona habitable de 500 metros de diámetro. Se construyó en las cercanías de Plutón, a casi 80 unidades astronómicas del Sol (12 mil millones de kilómetros). El transporte de mercancías y materiales hasta ese punto arruinó a la mayoría de los patrocinadores.
Gagarin está en el borde interior de la "heliopausa", el punto en el que el viento solar ya no puede seguir empujando un dispositivo interestelar. Se construyó para probar diferentes principios físicos de movimiento más rápidos que la luz que sólo podían producirse en el espacio interestelar. Poco después de que fuera completada, se descubrieron ruinas proteanas en Marte por lo que el esfuerzo se dejó de lado.
Historia[]
Después de una década por obtener alguna rentabilidad, la estación Gagarin fue vendida en 2159 a la Alianza de Sistemas por una pequeña parte de lo que costó construirla, y ésta la reacondicionó para que sirviera de centro de adiestramiento e investigación para el recién descubierto fenómeno biótico. En los primeros años de la investigación de la biótica, se evaluaron allí a los emergentes humanos bióticos. En pocas ocasiones expertos alienígenas fueron traídos a la estación para ayudar con el entrenamiento, al carecer los humanos de experiencia en dicho campo.
En 2169, después de que se cancelara el programa de Moderación y Adaptación de Bióticos, la estación se convirtió en un centro de investigación de ámbito general. Su remota ubicación y su premeditado aislamiento de Extranet hacen que sea popular para realizar investigaciones peligrosas, sobre todo en el campo de la inteligencia artificial. La primera IA estable de la humanidad, "Eliza", patrocinada por la Alianza, alcanzó la sapiencia en Gagarin en 2172.
Para 2186, la estación Gagarin tiene una población permanente de aproximadamente 9.000 habitantes. Ha sido propuesto un plan para moverla al baricentro gravitacional estable que hay entre Plutón y el relé de Caronte, permitiendo servir como portal entre el Sistema Solar y el sistema de Arturo. Sin embargo, los elevados gastos de mover con seguridad tanta masa han hecho que el plan se retrase indefinidamente.